La bacteria de la legionela se encuentra, de manera habitual en aguas superficiales (lagos, ríos, estanques) formando parte de la flora bacteriana.

Su desarrollo se da en condiciones térmicas de óptimo crecimiento comprendido entre 35-37 ºC, aunque puede sobrevivir entre los 20-45ºC.

La utilización dentro de los edificios de sistemas varios como climatización, que requieren agua para su funcionamiento, favorecen la aparición y crecimiento de la Legionela.

Pera garantizar su control, se deben llevar a cabo unas medidas de Control Higiénico-sanitaria para la prevención y control de la Legionelosis en edificios, infraestructuras e instalaciones de alto riesgo de difusión de la bacteria.

En cumplimiento con el real decreto 865/2003 del 4 de julio, se debe llevar a cabo un control de las siguientes instalaciones:

Instalaciones con mayor riesgo de proliferación de Legionela:

• Torres de refrigeración
• Condensadores evaporativos
• Centrales humificadores industriales
• Sistemas de Agua caliente sanitaria con acumulador y circuito de retorno.
• Sistema de agua caliente sanitaria con agitación constante y recirculación a través de inyección (spas, jacuzzis, piscinas. Vasos o bañeras terapéuticas, bañeras de hidromasaje, etc.)
• Sistemas de instalaciones interiores de agua fría de consumo humano (tuberías, depósitos, cisternas, deposito móviles, agua caliente sanitaria sin retorno.
• Sistemas de agua contra incendios
• Sistemas de riego por aspersión en el medio urbano
• Equipos de enfriamiento evaporativo que pulvericen agua, fuentes ornamentales
• Elementos de refrigeración por aerosolización en aire libre
• Equipos de terapia respiratoria y Otros equipos médicos que entren en contacto con las vías respiratorias.
• Respiradores, nebulizadores.